Día 5 de Febrero, Domingo de Septuagésima.
Doble. Orn Morados.
Conm. Santa Águeda, Virgen y Mártir.
La Misa de hoy sigue un paralelo con el Breviario, el cual nos habla de la creación del mundo y del hombre, de la caída de éste seguida de la promesa del Redentor. Dios puso al hombre en un jardín delicioso para que lo cultivase y gozase, dice el Génesis, y el Evangelio de hoy nos dice que “el reino de los cielos es semejante a un padre de familia que contrató obreros para cultivar su viña”. Dice San Gregorio que en este padre de familia está representado Dios nuestro Creador, y en la viña está representada la Iglesia. En todas las edades de la vida nos invita el Señor a trabajar en su viña, o sea a glorificar a Dios, a obrar el bien, a santificarnos, y premiará nuestros trabajo con el jornal de la gloria eterna. Pero la gracia de Dios se comunica a algunos con especial profusión por pura dignación de Dios, que es dueño de sus dones.
No es dable investigar y preguntar a Dios por qué a unos da mas y a otros menos; lo que nos toca a nosotros es disponernos de tal modo que atraigamos sobre nosotros la benevolencia y misericordias de Dios. Lo demás queda a Él.
Nació en Sicilia y de joven consagró a Dios su virginidad. Era extraordinariamente hermosa, bella y elegante, y el gobernador pagano se enamoró de ella. Quiso hacerla apostatar y hacerla suya; pero ni con promesas ni con amenazas consiguió lo que deseaba. La entregó a una mujer perversa para que la pervirtiera, mas Águeda salió siempre triunfante de todas las pruebas y peligros. Entonces lleno de ira, mandó cortarle los pechos; pero la noche siguiente fue curada milagrosamente por el glorioso apóstol San Pedro, que se le apareció en la prisión. Después fue arrastrada sobre agudos cristales y carbones encendidos, sirviendo éste nuevo tormento de materia de nuevo triunfo, y al volver al calabozo expiró, el año 251, bajo la persecución del emperador Decio. Su nombre figura en el Canon de la Misa. Es abogada contra las enfermedades de los pechos y contra los incendios y tempestades.
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